Pablo Leyton Miranda: “Mi experiencia en este programa de estudios ha sido completamente enriquecedora y positiva”

Pablo Leyton Miranda es de profesión médico veterinario titulado de la Universidad Austral de Chile. Tiene amplia trayectoria y conocimiento de la industria acuícola, ya que ha dedicado gran parte de su vida laboral a trabajar en empresas reconocidas a nivel nacional y mundial, y en la actualidad se encuentra cursando nuestro programa de Magíster en Nutrición Acuícola UACH.
“Mi tesis para optar al titulo de médico veterinario la realicé en calidad microbiológica de aguas que abastecían a la planta de proceso de Eicomar en Puerto Montt, la que para ese entonces procesaba pesca blanca y salmones de Eicosal”, partió recordando el profesional.
“Dicho trabajo dio acogida a mi primera aproximación en el ‘mundo de los salmones’. Fue allí que decidí dedicar el ejercicio de mi profesión a esta industria, de manera tal que tras terminar mi tesis y rendir mi examen de grado, me mudé a Chiloé para trabajar formalmente en la industria”, agregó.
Siguiendo con la conversación, el médico veterinario recordó que sus primeros pasos en el mundo de la nutrición acuícola los dio en el año 96, luego que se incorporara al equipo de trabajo de la empresa Vitapro Chile, que por ese entonces se llamaba Salmofood.
“He realizado diversas pasantías en instituciones de investigación, además de cursar un Magíster en Administración de Negocios (MBA) en la facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Austral de Chile”, agregó.
En el año 2012, el profesional de la salud animal realizó una actualización en la Alta Dirección de la Universidad Austral de Chile, lo cual de paso lo llevó a plantearse la idea de continuar estudiando para así aumentar su currículum laboral y académico.
“La motivación para ingresar a este Magíster tiene un aspecto personal y otro laboral. Este programa de estudios ha contribuido positivamente en la labor que desarrollo diariamente en Vitapro Chile, puesto que aunque todo estamos conectados en la generación de conocimiento y disponemos de capacidad propia para generarlo, el participar de un programa formal que te reconecta con la exigencia académica y te lleva a generar una cultura de aproximación a las opciones de mejora de la industria, complementa todas a las actividades que realizo”, señaló.
“Ahora bien, y respecto al porqué decidí este postgrado y no otro, es porque me gustó el plan de estudios, además del hecho de que se impartiera en el corazón geográfico de donde se ejerce nuestra labor. El poder continuar mi formación en mi ‘alma máter’ igual no deja de ser un tema motivador para mí”, complementó.
Al ser consultado por su experiencia dentro de nuestro Magíster en Nutrición Acuícola, el formado en la UACh no dudó en contestar que esta ha sido muy positiva y enriquecedora, ya que ha podido actualizarse en la materia además de compartir con un grupo humano altamente capacitado.
“Siempre es enriquecedor volver al training o la rutina académica. Además me gusta compartir con un grupo humano de alta calidad y no me refiero sólo al cuerpo académico, sino que también a los compañeros de ruta que han hecho el proceso mucho más agradable. Esto nos ha permitido formar una sinergia en el proceso de aprendizaje, lo cual se construye con lectivo y con la interacción de todos”, añadió.
Finalmente, el médico veterinario se refirió al trabajo de tesis que está realizando para finiquitar sus estudios en nuestro Magíster, donde comentó que su investigación está relacionada con la sustitución de aceite de pescado total y que se complementa con la ausencia de harina de pescado.
“Nosotros ya habíamos validado este último paso hace unos años atrás y ahora estamos en la continuación de un proceso que nos ha llevado más de 15 años. Hasta ahora los resultados son muy prometedores, pues la mayoría de los trabajos de este tipo (salvo contadas excepciones) se han realizado sustituyendo parcialmente el aceite de pescado por productos que denominamos ‘nobles’ y que aportan ácidos grasos eminentemente marinos”, indicó.
Concluyendo con que todo ha sido un reto, ya que aún cuando “las primeras luces están arrojando resultados prometedores, sería muy prematuro comentar algo puesto que los peces deben pasar diversas etapas en la extensa evaluación que compromete el estudio, de los cuales una parte es la que recoge esta tesis”.